El problema más importante y peligroso en las instalaciones de gas se produce cuando hay un escape de gas. Y en ocasiones, los nervios o la ignorancia al respecto, nos lleva a no saber qué es lo que hay que hacer para que no se produzcan daños mayores. En MEG, somos expertos también en mantenimiento e instalaciones de gas, y hoy queremos daros una serie de consejos ante la situación de que se produjese un escape de gas en casa o en tu empresa.
Lo primero y primordial será reconocer y detectar la fuga de gas. Para ello, habrá unas señales básicas que indicarán este escape:
- Olor a gas. Aunque el gas natural es incoloro y sin olor, se le suele añadir algún producto para darle cierto olor. Percibir este olor suele ser uno de los primeros síntomas de la fuga de gas. Todos hemos percibido en algún momento este tipo de olor, por lo que en caso de que se produzca habrá que ponerse en alerta.
- Al producirse un escape importante de gas se producirá un ruido parecido al de un soplido. En caso de percibirlo, habrá que revisar las instalaciones de gas de tu casa o empresa.
¿Cuáles son los riesgos de un escape de gas?
Los escapes de gas pueden generar daños materiales debido a las explosiones o incendios que pueden llegar a producir, pero uno de los mayores riesgos de una fuga de gas son los daños personales, que en ocasiones puede tener consecuencias mortales.
Hay que tener en cuenta que uno de los efectos que puede producir una fuga de gas en las personas es la asfixia, haciendo perder la consciencia y llegando a provocar la muerte. En otros casos el escape de gas libera cantidades de vapor, compuestos químicos y gases tóxicos que pasan a través del sistema respiratorio y pueden provocar importantes enfermedades respiratorias.
¿Cómo actuar ante un escape de gas?
Lo primero que habrá que hacer, en caso de que sea posible, será detectar la envergadura de la fuga que se ha producido en las instalaciones de gas, y una vez detectado, actuar de una forma u otra.
Fugas grandes. Si no puedes respirar con facilidad, el olor a gas es muy fuerte y escuchas un soplido que indica la salida abundante de gas, es posible que estés ante una fuga importante. Ante esta situación algunas de las recomendaciones que podemos seguir será:
- Evacuar la vivienda o el espacio donde se ha producido el escape.
- Si no eres un experto no intentes encontrar el origen.
- No utilices dispositivos eléctricos o mecánicos.
- No arranques el automóvil cerca de la zona.
- Ponte en contacto con profesionales o la suministradora de gas y sigue sus recomendaciones. Eso sí, no llames desde la zona de la fuga, sal al exterior para hacerlo.
Fugas pequeñas. En el caso de que sí puedas respirar y el olor no sea muy fuerte, cabe la posibilidad de que te encuentres ante un escape de gas menor. Ante esta situación, lo aconsejable es:
- Abrir puertas y ventanas.
- Si es posible, interrumpe el suministro de gas.
- Revisa los quemadores de la cocina y que todos los reguladores estén apagados.
- Comprueba que la caldera se ha apagado.
- Ponte en contacto con la distribuidora de gas.
De este tipo de problemas viene dada la importancia de llevar a cabo labores de mantenimiento en las instalaciones de gas y, sobre todo, que la realicen profesionales en el sector. En MEG estamos preparados para ayudarte y prevenir estos problemas que pueden llevar a daños irreparables.
¿Cómo prevenir una fuga de gas?
En las instalaciones de gas, como en cualquier otro tipo de instalación, lo más importante para prevenir estos problemas será realizar un buen control y mantenimiento de la misma. Es recomendable que se realice una revisión, al menos cada 5 años, por parte de profesionales. Además, de forma anual, también se recomienda hacer un mantenimiento de la caldera.
La limpieza también será primordial para un buen funcionamiento de las instalaciones de gas, así como instalar puntos de ventilación suficientes o cerrar la llave de paso general cuando vamos a estar mucho tiempo fuera de casa.
Consejos para el mantenimiento de la caldera
Algunos consejos que se pueden seguir de cara a llevar un mayor control en el mantenimiento de la caldera para un buen funcionamiento de las instalaciones de gas son:
- Controlar su presión. Con su uso, las calderas suelen ir perdiendo presión, por lo que ha de revisarse si se encuentra en los indicadores recomendados. Para que funcionen correctamente deberán tener la presión necesaria.
- Encenderla de vez en cuando. No utilizar una instalación con frecuencia puede llevar a que se estropee. Si la caldera sólo se utiliza en invierno, sería conveniente encenderla 10 o 15 minutos en verano para evitar inconvenientes después de un largo período de inactividad.
¡Contacta con nosotros y vela por tu seguridad y la de los tuyos!